TEST: ¿Estás fomentando el autodidactismo y la autonomía?

August31, 2020
by admin

Hoy tenemos una test que te guiará a dejarlos ser más independientes. También para saber qué decisiones  puedes tomar en determinadas situaciones y si están encaminadas a fomentar esta habilidad en tus hijos e hijas.

Te traemos las respuestas y explicaciones de cada una de las preguntas, para que puedas comprobar  si estas fomentando el autodidactismo en casa. ¡Vamos a ello!

1. Cada vez que mi hijo tiene que afrontar una situación en la que no voy a estar presente:

– Creo importante recordarle cómo debe afrontar la situación.

– Me limito a que se sienta acompañado en el proceso.

– Le hago saber lo que me preocupa.

La primera lección sobre cómo fomentar el autodidactismo que debemos tener muy presente es que se aprende más de los errores que de los logros a la primera. Por lo tanto, lo ideal es dejar que nuestros hijos se embarquen en proyectos por sí mismos, y nosotros que nos limitemos a acompañarles en ese proceso. Si estamos constantemente preocupados por si se “caen”, solo conseguiremos que no confíen en sí mismos y sus capacidades.

2. Mi hija llega del colegio y me cuenta un problema que ha tenido en el recreo:

– Dejo que sea ella la que construya la solución con mi apoyo.

– Le comento lo que creo que debe hacer por su bien.

– Si decide hacer algo que considero inadecuado, le persuado para que decida hacer otra cosa.

Tenemos que intentar dejar atrás la condescendencia con la que a veces nos dirigimos a nuestros hijos. Nosotros ya hemos vivido muchas de las situaciones que han vivido ellos, y además somos los adultos, por lo que creemos que siempre tenemos la solución a todo y así se lo transmitimos. Sin embargo, para que nuestros hijos aprendan a buscar y encontrar soluciones, justamente tienen que esforzarse por llegar a esas soluciones ellos mismos. Pensemos en esto a largo plazo, cuando sean mayores no nos tendrán a nosotros a toda hora solucionándoles cada problema que les surja, necesitarán ser autónomos y resolutivos. Y, para ello, han de empezar ya.

3. Un día cualquiera, se acerca tu hijo o hija y te pide que confíes en él, que le dejes decidir sobre algo que considera que puede asumir ya la responsabilidad. Pasa el tiempo y no hace lo que deseas. ¿Qué haces?

– Con tranquilidad, le digo que me ha defraudado y que no está haciendo lo que debe.

– Le animo a que cumpla con sus obligaciones.

Muestro respeto y confianza por su proceso de tomar decisiones.

Que nuestros hijos e hijas sientan que confiamos en ellos y en su capacidad para decidir es fundamental. Muchas veces harán cosas completamente distintas a lo que nosotros hubiéramos hecho en su lugar, pero no podemos pretender que nuestros hijos actúen igual que nosotros.

4. Cada vez que mi hijo ha tenido o tiene que afrontar una realidad novedosa, como ir a una excursión, o salir con sus amistades, lo que suelo hacer es decirle:

– Que cualquier problema que surja no dude en llamar y que conteste a mis llamadas o mensajes.

– Que se la pase bien, que disfrute y se cuide, que a la vuelta ya nos contará.

– Que se porte bien, que no se meta en líos, que haga caso al profesorado o los monitores.

Cuando presuponemos que les va a pasar algo o se van a portar mal, ya les estamos colgando la etiqueta de “malos” o “rebeldes”. Y con esas etiquetas ya puestas de forma previa, es mucho más fácil que nuestros hijos cumplan esas expectativas. Porque ellos asumen las etiquetas que los adultos les ponemos y que no hacen más que limitarles.

5. Mañana tiene un examen, exponer un tema o tocar la flauta delante de toda la clase y te muestra su nerviosismo mientras está cenando, ¿qué haces primero?

– Le digo que se tranquilice, que va a hacerlo muy bien.

– Entiendo que se sienta así y le hago saber que es normal su estado emocional.

– Le comento que después de cenar repasaremos juntos el tema.

Es muy importante atender al plano emocional de nuestros hijos e hijas cuando se enfrentan a situaciones que despiertan en ellos nerviosismo o ansiedad. No podemos olvidar que todas las emociones son legítimas, y así tenemos que transmitírselo a nuestros hijos.

6. Cuando mi hijo o hija se tiene que enfrentar a un reto:

– Anticipo lo que le puede ocurrir para que lo tenga en cuenta.

– Valoro lo que haya hecho en situaciones parecidas anteriormente.

– Escucho sus inquietudes y miedos.

Al igual que en las preguntas anteriores, anticipando y comparando solo les transmitimos nuestros propios miedos a nuestros hijos. Pero, ¿y los suyos? ¿qué es lo que les preocupa? ¿y por qué?  Parémonos más a escuchar a nuestros hijos e hijas, a calmar sus inquietudes, a entender sus miedos…

7. Previo al autodidactismo (aprendo por mí mismo) está el didactismo (alguien me enseña). Para ejercer esa “enseñanza externa” previa considero importante:

– Atender a su plano emocional, a sus motivaciones y también a sus temores.

– Conocer su forma de pensar, sus capacidades y lo que realmente sabe hacer para favorecer su desarrollo desde una base sólida.

– Las 2 respuestas son correctas.

Partir de una base sólida en lo racional, y no perder de vista lo emocional: una combinación imprescindible para favorecer el aprendizaje de nuestros hijos/as.

8. Mi hija tiene una gran motivación por las ciencias y quiere avanzar en un temario que aún no están dando en clase, ¿qué haces?

– Le animaría a que investigue por su cuenta nuevos contenidos en función de sus intereses y observaría cómo se desenvuelve en su primera experiencia autodidacta.

– Le propongo que repase contenidos ya vistos.

– Le advierto que si avanza en el temario puede que se aburra luego en el colegio.

¡Todas las madres y padres que respondieron a este test han acertado en esta pregunta! Y así es: cuando encontremos una pasión, curiosidad, motivación… lo mejor que podemos hacer por nuestros hijos es fomentarla para que puedan desarrollar todo su potencial.

Educación, parentohood

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *